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¿Cómo ser el líder que usted quisiera tener? (Aunque ud. no sea jefe)


¿Cómo ser el jefe que usted quiere tener?

La felicidad en el trabajo y el bienestar laboral no son simplemente beneficios adicionales, sino componentes fundamentales de una cultura organizacional saludable. Un estudio de Gallup de 2021, reveló que las empresas con altos niveles de engagement entre sus empleados reportan un 21% más de rentabilidad.


Sin embargo, el mismo estudio encontró que solo el 36% de los empleados se siente realmente comprometido con su trabajo, subrayando una brecha considerable entre el jefe y sus equipos. Este escenario destaca la necesidad imperante de líderes que no solo dirijan, sino que inspiren y fomenten un ambiente de trabajo positivo, incluso si no poseen un título formal de liderazgo.



1. Líder es quien inspira, no solo quien manda.


Para ser el jefe que uno desearía tener, es crucial adoptar una mentalidad de servicio. Simon Sinek, autor de "Start with Why", sostiene que los líderes más influyentes son aquellos que priorizan el bienestar de su equipo sobre las metas a corto plazo. Este enfoque requiere una comunicación abierta, fomentar la confianza y el respeto mutuos.


Imagínese a Laura, una diseñadora del equipo de comunicaciones que demuestra su compromiso no solo con sus tareas, sino también con sus valores personales y profesionales, siendo puntual, respetando los plazos y manteniendo un alto estándar de ética de trabajo. Este comportamiento sienta las bases para un equipo que valora la responsabilidad y la integridad, inspirando a su equipo a seguir sus pasos.


Laura, es el jefe que desearía tener.



2. Las personas importan tanto o más que los resultados.


La empatía es la piedra angular de un ambiente laboral positivo. Daniel Goleman, un psicólogo reconocido y autor de "Inteligencia Emocional", sostiene que la empatía no solo mejora las relaciones interpersonales sino que también es una habilidad de liderazgo clave que fomenta un ambiente de apoyo mutuo. Implementar la empatía en el lugar de trabajo significa escuchar activamente, entender las preocupaciones de tus compañeros y demostrar un interés genuino por su bienestar.


Imaginemos a Luis, un desarrollador de software que, sin un título de liderazgo o un equipo a cargo, se toma el tiempo de escuchar a sus compañeros cuando enfrentan desafíos, tanto personales como profesionales, y ofrece su ayuda desinteresadamente. Este enfoque no solo mejora el clima del equipo sino que también ha incrementado la colaboración y la innovación.


Luis, es el jefe que desearía tener.



3. Estar "ahí" cuando nos necesiten.


Fomentar la colaboración implica que todos estemos dispuestos a ayudar cuando alguien lo necesite, incluso, cuando no ha pedido ayuda aún. Líder es aquel que toma la iniciativa de ayudar a sus compañeros, reconoce las contribuciones de cada miembro del equipo y alentar la participación en la toma de decisiones.


Imagínese a José, un analista de datos, que nota una desconexión entre los equipos de marketing y ventas en su empresa. Aunque José no tiene un rol de jefe, propone una reunión conjunta para discutir cómo los datos pueden ayudar a mejorar las estrategias de ventas y marketing. Durante la reunión, alienta a todos a compartir sus perspectivas y explorar soluciones innovadoras juntos. La iniciativa de Luis no solo mejora la colaboración entre los equipos sino que también destaca la importancia de liderar a través del ejemplo y la iniciativa personal.


José, es el jefe que desearía tener.



4. Comparta su sabiduría y experiencias


Simon Sinek, enfatiza el rol del líder como un "mentor", argumentando que el verdadero liderazgo implica enseñar, guiar y apoyar, no solo asignar tareas o supervisar el trabajo.


Paola es una programadora senior que dedica tiempo a mentorear a los nuevos integrantes del equipo. Comparte su conocimiento y experiencia ayudado a los recién llegados a integrarse más rápidamente, mejorando la cohesión y el rendimiento del equipo.


Paola, es la jefe que desearía tener.



5. Acompañe a sus compañeros a equivocarse y a innovar con cada aprendizaje


Charles Duhigg, autor de "Smarter Faster Better", sostiene que los entornos que animan a la experimentación y la aceptación del fracaso como parte del aprendizaje son más propensos a innovar y prosperar. Al mismo tiempo, Brené Brown, investigadora y autora de "Dare to Lead", argumenta que la vulnerabilidad es el núcleo de las relaciones humanas significativas. Mostrarse auténtico y abrirse a los demás construye confianza y fomenta conexiones profundas.


Ana, responsable de contenidos en el equipo de marketing, implementa sesiones mensuales de "brainstorming" en las que inicia compartiendo un fracaso personal o profesional de la semana, invitando a otros a hacer lo mismo. Además se premian las ideas más innovadoras, incluso si no todas se llevan a cabo.


Este enfoque ha llevado a la implementación de campañas revolucionarias y ha reforzado una cultura de valentía y creatividad. También ha creado un espacio seguro donde el equipo se siente cómodo compartiendo y apoyándose mutuamente.


Ana, es la jefe que desearía tener.


Líder no es el que tiene gente a cargo, sino aquel que se hace cargo...


Como podemos ver, el liderazgo trasciende los títulos y las jerarquías. No se necesita un rol oficial de liderazgo para demostrar que tenemos madera para cuidar de nuestros compañeros e inspirarlos a ser mejores humanos y profesionales.


¿Cómo aplicaría usted estos principios en su entorno laboral? Su capacidad para influir y marcar la diferencia es más grande de lo que usted imagina y comienza con el paso audaz de asumir el rol de líder que usted quisiera tener, independientemente de su posición oficial.


Este enfoque dinámico hacia el liderazgo no solo transformará su entorno laboral, sino que también enriquecerá su viaje profesional, demostrando su habilidad para liderar equipos de forma estelar.

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